Sólo Dios sabe cuanto te amé. Cuanto amé tu pelo lacio sobre la cara y tus gestos de niño bueno iluminados por la penumbra de una pequeña luz titilante al fondo. Tus frases, de las que sólo vos y yo conocíamos su significado, la pálida visión de un renacer en el ocaso.
Y si te amé por algo fue, y por algo terminó. Y si amé algún cálido beso en la frente, con nuestros brazos entrelazados y la música de algún disco viejo de fondo era porque le seguía al milagro de tu boca expandiéndose por mi cuerpo. Y si dejé de amar tu filosofía barata, comprada en algún puesto de inconciencia en las calles que caminaste con los ojos cerrados, fue porque jamás encontré consuelo en ella. Feliz año nuevo, darling.

Año nuevo, vida nueva. Los dichos se vuelven problemáticos. Me dejaste ir como en octubre, cuando te diste cuenta que las cosas no se logran sólo al deseárlas, y ahora te arrepentís. Siempre tuviste eso de ser, ellas decían que lo traías en la sangre, yo más bien pienso que lo mamaste, las adaptaste a tu desquiciada humanidad. Como sea, quisiste que me fuera. Mis manos buscaron a tientas las llaves de casa entre las botellas rotas y el inconfundible aroma a cigarrillo que dejabas cuando eras más mío que tuyo. Hombres-trauma, alcohol y un poco de masoquismo, mi amor. Me fui.

El principio del fin

Y ya no quedan dudas... después de este enigmático 30 de diciembre del 2009 se sucederá el 31 y ya estará claro. El año habrá terminado a las 00:00 en punto. Es casi una cuenta regresiva, ya puede sentirse la presión ¿Qué pasará cuando cese? Nada, tan sólo habrá empezado el 2010...


Me gustaría hacer un pequeño análisis de lo que me pasó este año... pero supongo que voy a quedarme corta, es imposible poner en palabras los sentimientos y las vivencias de todo un año (por suerte).


Este año cambié mucho y a la vez me reafirmé como persona. Nada de esto es nuevo porque sucede cada día, a cada paso que doy. Nos sucede, a todos. Pero hubo un par de cosas especiales.


• Empecé siendo muy amiga de Paula. Tanto que podría decirse que pasé todas mis vacaciones con ella, o por lo menos esa es la impresión que tengo ahora. Sería lógico hoy por hoy decir que yo nunca confié en su amistad y que simulaba aguantarla. Pero no. También sería estúpido. Desconfié en un principio, en el 2008, con tanta gente alrededor. Pero aunque era, y siempre fue muy egocéntrica, realmente la quise y la pasé muy bien dando vueltas por cualquier shopping, hablando de cualquier cosa hasta quedar afónicas, sacando mano, tomando helado, hablando de nuestros problemas. Sí, está bien; ahora todo eso terminó y supongo que es mejor. Pero no voy a renegar en este punto, gracias a ella yo salí de mi casa en vacaciones y la pasé bien.


• Me fui a Disney. Eso por lo que estuve esperando quince años, o por lo menos desde el verano 2008, cuando recién terminaba 8vo y viajar a Disney me parecía algo muy lejano. Y llegó. Fue genial, el ir a comprar ropa, el ir a las reuniones, hacer la valija, la adrenalina brotando poco a poco, esa presión en el pecho, el cuello endurecido, el aire que corría entre mí misma y los demás cuando el momento llegaba. Jamás me voy a olvidar que me olvidé el reloj que me gustaba tanto en Rosario, y no se me pasó la angustia en varias horas. Saludar a mi mamá por última vez antes de subirme al colectivo para ir a Ezeiza, verla llorar con Nancy. Cuando por fin nos alejamos la miré a Emilia y le dije: "Hoy va a ser un día largo" y sí lo fue, pero no puedo creer con la rapidez que pasó. Y sin mi celular (gente, yo pierdo el equilibrio si no tengo mi celular cerca u.u), todavía parece increíble, sin mi celular. ¡Y el avión! No sólo que se me rompió el mp3 en el avión a la ida, sino que no me habían puesto entre ninguna chica que viajara. Estaba en las filas del medio, las de cinco asientos, en el medio, del lado que buscaras, en el medio, entre un negro y un inglés. Para colmo mi fila era distinta a las demás y no tenía la pantalla en el asiento de adelante, como todas... Casi me muero de la angustia, hasta que descubrí que estaba guardada en el apoyabrazos (respiré). Y allá... allá todo fue genial, estaba libre. Me hubiera gustado poder disfrutar más de la noche en el hotel, pero lamentablemente terminaba muerta cada parque. Pero no hay maneras de describir lo bien que se siente estar en otro país y encima, en el mundo Disney. Es cosa aparte.


• Cumplí 15. ¡Oh, cumplí quince, cumplí quince! En realidad no es para tanto, por lo menos para mí, soy de esas personas a las que les gusta cumplir años, sean cuantos sean (supongo que a los 40 o 50 no voy a decir lo mismo, jaja) y también soy de esas que no les gusta festejarlos. No porque no me guste juntarme con gente ni por una filosofía extraña, simplemente porque me pongo muy nerviosa en tener que ser la anfitriona de algún evento. Por ejemplo, me saca de quicio tener que hacer una lista de invitados o pensar en la cantidad de comida a comprar, o el lugar. Hice algo chico. Invité a poca gente que no sé si volvería a invitar en su totalidad. Mejor no hablar de eso.


• Me saqué un 5,5 y un 4,5 en Dibujo Técnico. El 5,5 fue en la primer prueba del primer cuatrimestre y el otro fue en la primer prueba del segundo. Este fue el primer año que reprobé dos pruebas, y hacía desde 7mo que no me sacaba menos de un 6. Cuando vi la letrita de Carranza, en esos primeros días de clase, casi me muero. Sí, a esa prueba, me la lloré toda. Empecé ir a particular recién después de la segunda prueba, en la que me saqué 7, pero entendía mucho más. Ahí me di cuenta que con esa materia puta, sola no iba a poder y empecé a ir a particular. La segunda mala nota cayó del cielo, porque yo  había estudiado como siempre, excepto las justificaciones que valían la mitad de la prueba. Así que si no hubiera sido por ellas yo hubiera tenido un 9,5 jaja. Pero esa vez no me importó mucho, pero me preocupó, ¿sería que salir con Marlon me tenía en la luna? No, definitivamente no había sido así porque en las otras pruebas me saqué de 9 para arriba, pero uno nunca sabe, jaja.


• Conocí a Majo, Martu, Vane, Flor y Mari. Las chicas de la Cultural. Siempré odié ese lugar... tiene aire a escuelita privada, a succionador de esperanzas, a cortador de alas. Somos sus clientes, y ellos se parecen mi profesora de tenis: siempre listos para dar clases hasta el último segundo. No zafás ni por joda. Lo genial fue hacerme en ese grupito tan copado. Éramos seis (yo jamás me había sentido parte en un grupo tan grande de solo chicas) y nos fuimos conociendo de a poco. Empezamos siendo Vane y yo, que nos conocimos en la puerta del salón porque habíamos sido las primeras en llegar el primer día de clases. Nos hicimos amigas tan rápido que todos asumieron que nos conocíamos de siempre e íbamos a la escuela juntas. Después apareció Martu. Eso fue en un intercambio de miradas raro, ambas observamos con desprecio al típico grupito de huecas que estaba en un rincón y empezamos a hablar, a sacar mano en realidad, jaja. Se le anexó Majo y eso si que no me olvido como fue. Entró más tarde que el resto y yo no la conocía ni la había visto, iba a la escuela con Martu y estuvo con ella el primer día. Me tocó con ellas dos y Francisco (gran amor platónico de muchas) en un grupo estúpido de esos que arman para que hablemos al pedo e inmediatamente noté que estaba loca. Hablaba mucho y decías cosas divertidas, pero se la notaba medio invasiva, parecía borracha =P, pensé que podía llegar a caerme bien, y así fue. Si he construído relaciones especiales, una es con ella. Y Flor llegó... ¿Cómo llegó? Tarde, si también, pero la integramos después, cuando vimos que era muy solitaria y nosotras necesitábamos destruir al grupo de huecas según Martu. Eramos cuatro y ellas, cinco. Qué horror. Majo se llevó bien con ella al toque y todas las demás no tardamos mucho más: faltaba Mariana. Mariana no se lleva bien con Majo por principio, pero Martu era amiga. Aunque había un inconveniente... Ella era "de las otras". Aunque claro, un día eso terminó y se unió al grupo. Ahora el año que viene planeamos quedarnos así como estamos, las seis juntas.


• Hice el Seminario de Geografía. Yo no tenía idea de que existía tal cosa hasta que el año pasado Gonzalo me contó del suyo... casi me desmayo. ¿Qué era ese titánico proyecto de montones de hojas? ¿Cómo era eso de salir a investigar? Fue una de las experiencias que más me llenó. Lo empezamos en el primer cuatrimestre y nos colgamos bastante en las vacaciones de invierno. Cuando el curso se despabiló ya teníamos la entrega encima y teníamos que correr. Sólo contábamos con miles de hojas de diario y un par de hipótesis mal hechas (que hubo que reformular y agregar trabajo). El segundo cuatrimestre el seminario fue la excusa perfecta para faltar a cualquier lugar. Eran horas de investigación (dos entrevistas y dos encuestas) y horas de redacción. Sin embargo fuimos el equipo que mejor llegó. A las ocho de la noche del día anterior ya estaba encuadernado. Pero eso me (nos, asumo) preocupó. También era más corto que el de los demás... ¿estaría incompleto? Tal vez, pero la profesora tenía en mente que iba a ser genial y nos aprobó a todos con nueve después de una exposición penosa según Sietecase que debía criticar mi volumen de voz. Lo curioso fue que el trabajo nada más contó con dos errores estúpidos. Tal vez ni siquiera lo leyó :)


• Me reconcilié con Mayra. Eso fue realmente curioso, porque yo ni quería hacerlo. Daba por hecho que la amistad entre nosotras estaba terminada y que ella era una perra fría y desalmada (sí, eso). Si hablábamos, cada tanto, era sólo para mantener una apariencia cordial y no quedarnos tan solas (ser por años amiga sólo de varones en el curso puede llegar a ser duro). Pero un día, chateando (le hablé para preguntarle algo específico, según me acuerdo) le propuse sincerarnos... "¿No nos odiamos desde hace dos años?" y la charla no pudo seguir con más sinceridad. Nos dijimos todo, todo lo que pensamos de la otra, todo lo que maquinamos y todo lo que habíamos vivido y que no habíamos podido compartir. Realmente la odiaba mucho ahora que lo pienso, después estuve en una etapa de decir "le habló más y mejor porque las cosas están sobre la mesa ahora" y después fue creciendo y creciendo hasta volver a ser las amigas que eramos antes... inseparables. Fue a eso de agosto y representó un gran sostén para mí, creo que nunca voy a conocer a alguien tan distinto y tan igual a mí.


• Salí con Marlon. ¡Al fin! Desde hacía años que quería salir con alguien en serio, y lo logré, jaja. Cada vez que intentaba hacer el duelo con el otro chico (prefiero no nombrarlo, pero está todo bien) pensaba que jamás iba a conocer a alguien que cumpliera las expectativas, que fuera así de lindo y de... lindo. Sí, digamos que no tenía nada más, ¡pero a mí me gustaba mucho! Y entonces, justo dos días antes de saber que este me tenía desadmitida o algo así, lo conocí a Marlon. Fue en Julio, en el medio de las vacaciones por la Gripe Porcina, y nos llevamos bien al instante. Creamos una relación muy fluída por msn y yo no entendía por qué tanto interés en hablar conmigo, (convengamos que desde el primer momento se lo veía muy conversador y nadie "se enamora" de otro por chat) tal vez fuera conversador. Como fuere, si yo sospeché de la onda que había y no hice nada por detenerla fue porque hacía un par de meses atrás había notado que era lindo. Lindo y alemán, y esas dos cosas, se sabe, pueden conmigo. Fue un período rarísimo y buenísimo en mi vida. En la primer cuatrimestral, el 3 de agosto (sí, me acuerdo, ¿qué?) se puso a hablar conmigo a la salida y casi muero de la vergüenza. Por empezar se me cruzó el rayo de que no era tan lindo (yo esperaba a Brad Pitt jaja) y que Nacho estaba muy cerca (Nacho es muy dañino y perceptivo), así que lo traté así nomás, de hecho, intentaba convencerme de que no pasaba nada, de que era todo "así nomás". Incluso en esos días lo invité a mi banda para que cantara y aceptó encantado (muy, jaja), en la salida de cada cuatrimestral instintivamente nos buscábamos y nos quedábamos hablando horas. ¿Solos? No, solos no, Paula e Iván también estaban. Pero un día me convencí de que no era todo "asi nomás" y fue cuando nos mensajeamos por primera vez más de dos horas. Y eso sería siempre así. Todos los días y a cualquier hora, cualquier excusa era buena por parte de nosotros dos (de hecho, extraño eso) y se dio, y si se dio, fue porque tenía que ser así, aunque después se terminó en un mes, y todo mal. Tenía que ser.


• Hicimos el video de video. Digamos que no nos importaba mucho porque se nos había superpuesto con el seminario, hasta que nos dimos cuenta que en una semana debíamos entregarlo. Vanesa nos ayudó, y la molestamos bastante. La experiencia de filmar, de escribir un guión, de dirigir, para mí, es indescriptible. Me dedicaría toda mi vida a eso (aunque en caso de no triunfar me moriría de hambre, ya lo sé ¬¬). El primer día de filmación fue un éxito. Estábamos todos menos Lucas y Francisco y todos le pusimos ganas. Maquillando a Vane, maquillando a Vicente, jaja, haciendo las tomas una y otra vez desde distintos ángulos. Y el segundo día para filmar trajo el caos. Prefiero no ponerme a hablar de eso una vez más, pero jamás me voy a olvidar de haber tenido que ir a hablar con el gordo (y sí que le re "cabió" a Nacho, porque nos dio la razón a Mayra y a mí). ¿Y las ocho horas de edición? No estuve, pero me dijeron que fue aniquilador, pero, el resultado, fue genial. El profesor nos dijo que fue uno de los mejores videos hechos en la historia de la materia y lejos el mejor del año.


• Hice el taburete. ¡El famoso taburete! ¡Ése que marca generaciones enteras de polialumnos! Bah, a mí la materia no me gusta en lo más mínimo ni me gustará. De hecho, hacerlo me rompió soberanamente las pelotas (no como Mayra, que ama todo eso). Recién caí en la cuenta de que tenía mi taburete cuando lo tuve que barnizar (ya sé que no era barniz 8-) ) y cuando me lo llevé con mi mamá en taxi. De hecho creo que la proeza dentro de esto es haber generado una relación tan suelta y tan loca con un profesor. Yo siempre les hablo desde el respeto y con cierta timidez, pero Pablo... No sé, Pablo quiere que lo traten como lo traté, por eso se hace el difícil. Está re loco, le faltan un par de tornillos, y por eso me cae tan bien.


• La tercera funcionó como un curso unido. Y hasta me incluyeron a mí, sorprendente. Esto no debería estar en esta entradita de mi blog sino en el libro de los Records Guiness. Siempre fuimos un curso que no se llevó demasiado bien y todos sabemos que no es necesario ser mejores amigos ni llevarse espectacularmente bien para mantener cierto nivel de unidad. Pero no habían funcionado estas filosofías hasta ahora. Tal vez porque algunas piezas demasiado elitistas todavía funcionaban, o tal vez porque este año todos crecimos de golpe, maduramos. Después del cumpleaños de Mariana nos dimos cuenta lo bien que eramos capaces de llevarnos y cómo podíamos pasarla genial todos juntos. Y eso generó una especie de conducta. Admirable, curso, admirable.


• Conocí a Uri. ¡Y Eso no es poca cosa! De hecho ya lo conocía desde principio de año porque se llevaba bien con Mayra e iban juntos a la Cultural, pero yo no había hablado con él hasta el día que decidí hablarle por msn para decirle "Feliz Halloween", jaja, qué locura que cargo. Gracias a él volví a la nostalgia de mis épocas de pequeña otaku y me convertí en una fanática de Death Note empedernida, además de aprender a comer con palitos. Uri es muy especial, es radiante, es alegre. Es de esas personas que parecen no sufrir, y aunque es realista y centrado en la realidad (es decir no vive su vida en estado ebrio xD) es capaz de encontrar millones de excusas para ser optimista. Optimista, y no sólo eso. También leal. Un tipo copadísimo, en resumen.


• Empecé a escribir Remembering. Fue todo en el clásico proceso de enviciarme con el blog, pero significó mucho más. No me alcanzan las palabras para explicar cuanto amo esta historia, debe ser porque es la primera que escribo y me siento conforme: con la historia, con cómo está escrita. Incluso a mí misma, y aunque le encuentro miles de errores, me gusta leerla, me transporta a ese mundo. ¡Y cómo no! Aunque el argumento no tenga nada que ver conmigo, es lógico que representa muchas escenas que significaron mucho para mí, de alguna u otra manera (el capítulo cuatro también, pero menos, sexópatas reprimidos -.-)


• Fui al Polirock. Eso es digno de decir "archívese" y guardarlo en el cajón de hitos. Yo nunca lo había hecho, por paja supongo. Y fue una experiencia inolvidable. Se suspendió por lluvia, creímos que había sido todo para nada, nos fuimos a tomar un helado y cruzarnos gente del Poli por ahí (eso es inevitable, mágico y maravilloso) y cuando volvimos, el Polirock había reiniciado su marcha. Me la encontré a Giovana (esa chica está en cada una xD) y a "algunas 'personas' más" (comillas dentro de comillas, sí). Fue... buenísimo. Especialmente la picazón en las orejas, jaja. Me quedaron rojas y además mutiladas por la acústica.


• Conocí a Paulina. Bueno, era otra de las personas que ya conocía por ósmosis, en este caso por ser la super archi mega enemiga de Paula. Siempre le tuve cierto... miedo, debía ser por las historias de terror que me contaban. Pero hace un par de meses se me cruzó la idea de que seguro me caería bien. Parecía muy reflexiva y de gustos muy originales. Entonces ahora, en las vacaciones, tuve la loca idea de hablarle por Messenger (qué loca =O) y nos llevamos demasiado bien y demasiado rápido. Pasamos horas hablando, de hecho lo hacemos. Incluso, después de pocas semanas de "conocernos" (conste que ella también sabía quien era yo) me invitó a su cumpleaños. Siento como si la conociera desde hace mucho, como si hubieramos hablado de nuestras vidas miles de veces. En cierto punto (en varios en realidad) me hace acordar mucho a Mayra, mucho. Y me sorprende darme cuenta que yo también le caigo bien, porque hay veces en que la personalidad de algunas personas copadas es tan exclusivas que se centran en que sólo vos las admires y respetes. Ella no, es completamente recíproca. ¡Y está muy loca! Jaja.


• Empecé a hablar con Celi. Y sí, digamos que fue a pedido, jaja, pero la verdad me había olvidado porque empezamos a hablar el 19 de diciembre, jaja. Las circunstancias de hecho que fueron un poco extrañas. Nueve de la noche, Córdoba y Circunvalación, ningún puto colectivo a la vista y un puente enorme que rezaba "Bienvenidos a Rosario". Nos sentíamos perdidas, en el medio de la nada. Maldito banderazo. Pero me hice estas amigas de batalla. Chucky, Celi y Sofía. Y con Celi seguí hablando, tal vez porque sabía que era simpática, o tal vez simplemente porque se me ocurrió. ¡Y es tan genial! Parece que vive en una nube de pedos, pero ojo, es una máscara ¬¬


En fin, un año genial. Obvio que lloré, obvio que me mandé mis cagadas (A) pero fue, junto con el 2008 el mejor año, lejos. ¡Vamos, que no hay dos sin tres, quiero un 2010 así! :)

Is this the end?

Littlest things - Lily Allen

Sometimes I find myself sittin' back and reminiscing, especially when I have to watch other people kissin'. And I remember when you started callin' me your miss's, all the play fightin', all the flirtatious disses. I'd told you sad stories about my childhood, I don't why I trusted you but I knew that I could. We'd spend the whole weekend lying in our own dirt, I was just so happy in your boxers and your t-shirt.


Dreams, Dreams of when we had just started things. Dreams of you and me. It seems, it seems that I can't shake those memories. I wonder if you have the same dreams too.


The littlest things that take me there, I know it sounds lame but it's so true, I know its not right, but it seems unfair that the things are reminding me of you. Sometimes I wish we could just pretend, even if only for one weekend... So come on, tell me: is this the end?

Drinkin' tea in bed, watching DVD's. When I discovered all your dirty grotty magazines you take me out shopping and all we'd buy us trainers as if we ever needed anything to entertain us... The first time that you introduced me to your friend, and you could tell I was nervous, so you held my hand. When I was feeling down, you made that face you do. There's no one in the world who could replace you.


Dreams, dreams of when we had just started things. Dreams of me and you. And it seems, it seems that I can't shake those memories. I wonder if you feel the same way too.


The littlest things that take me there, I know it sounds lame but it's so true, I know it's not right, but it seems unfair the things reminding me of you. Sometimes I wish we could just pretend even if only for one weekend. So come on, tell me:
Is this the end?

PD: No es por nada que subo esta canción hoy... (sí, meláncolica y masoquista empedernida)

Toda esta tragi-histeria debería tener fin

En contraposición a lo que podría pensarse al leer el título no tengo ninguna intención de escribir nada de tinte filosófico, de hecho, casi todo lo contrario. Lo que me trae a escribir acá es un hecho completamente cotidiano...

Y sí, creo que tengo un problema de adaptación a la vida en sociedad. ¿Soy yo la equivocada o la sociedad está mal hecha? Obviamente, yo me inclino por la segunda, pero por una cuestión bastante obvia... Si la sociedad fuera como a mí me gustaría, sería muy, pero muy autista distinta.

"¿A qué se debe este texto tan pelotudo?" se puede preguntar el que lo lea. Es que viajar dos veces en colectivo hoy (ida y vuelta de tenis) me hizo darme cuenta, y casi preocuparme por el hecho de que vivo como si estuviera sola en este mundo y a las demás personas (que no sé qué se meten en mi vida) parece molestarle...

Veamos: si no estoy siendo acompañada por una persona de mi interés (llámese chico que me gusta, mis amigas, mi vieja, etc, etc) se puede concluir que estoy sola. Claro, estoy sola, por lo tanto actúo como si lo estuviera. ¿Qué tiene de malo eso?

NO SÉ

Pero la sociedad se empeña en demostrarme que tengo que observarlos todo el tiempo, como si no tuviera el riesgo de padecer vómitos o cefalea.
Esta mañana me subí al 141 y sabía que iba a tener un viaje de aproximadamente media hora. Encontré un asiento libre adelante, en la tercer fila... Algo me decía que no me tenía que sentar ahí, debía ser la experiencia. A mi alrededor todo parecía ser cuchicheos de "personas mayores", quejas, y calor, calor a las nueve de la mañana, calor.

Realmente no tengo idea como pasaron las cosas, porque yo estaba pensando en... cosas. Siempre estoy en otro mundo, volando por ahí, disfrutando del escaso vientito que entra por la ventanilla, canturreando en voz baja o pensando nuevas cosas que puedo escribir. Y de repente, miro para atrás en la típica actitud inconciente del que busca la solución a su bloqueo imaginativo en rotar el cuello y veo al colectivo colmado, llenísimo (pero, ¿cómo? si cuando yo me subí no había tanta gente...), en fin, en la clásica actitud de "aquí no hay nada" vuelvo al mirar al frente... Justo para presenciar como la vieja esa que estaba sentada adelante mío (de la que había reparado antes, ya que antes tenía todo adelante para ver por el vidrio grande y en un momento llegó y se sentó y me tapó todo, todo), decía, justo para presenciar el momento en el que se paraba y decía mientras me miraba (¡me miraba!) "Cómo acá los jóvenes no hacen nada por los mayores, no le dan el asiento ni nada, yo tampoco voy a hacer nada por ellos" y me sonrió cínicamente mientras la mujer de al lado asentía y me miraba con curiosidad.

¿QUÉ?

Lo peor, es que como nunca presto atención no sé a qué se referían... Qué habré hecho, o no hecho... Vaya uno a saber... Pero me quedé indignada, si alguien quería un asiento, un puto asiento mágico y veía que yo estaba en la luna, estaba en todo su mágico derecho (sí, como el asiento) de decirme: "¿Me darías el asiento?" entonces yo me hubiera levantado con mi cara de culo tradicional y me hubiera ido al fondo, donde siempre tendría que haber estado. Pero no... prefieren dar lástima... Bueno, está bien. Yo, señora, voy a seguir en la luna, en mi mágico (ajá, mágico, todo mágico hoy) mundo de cristal blindado donde nada más entro yo y la gente que vale la pena (bueno, no todos valen tanto la pena jaja), pero ¿sabe qué? ME VOY A IR AL FONDO, ASÍ NO ME VE, ¿ENTENDIÓ?

Y a la vuelta... a la vuelta no pasó nada demasiado malo, simplemente que mi paranoia residual de las nueve de la mañana me hizo sentir que ciertas actitudes mías eran reprobadas por el resto...
Me fui al fondo. Bien al fondo, a la fila de atrás, a un costado, ventanilla... Genial... Lástima que llovía.

Y ustedes saben que no hay nada mejor que la lluvia.

Creo que la mujer que estaba al lado mío esperaba que cerrara la ventanilla para no mojarnos. Qué locura. Señora, yo quiero mojarme y la ventanilla es mía. Jajaja. No, en serio... Yo disfruto que me salpiquen las gotitas de lluvia y más si estoy sola. ¿Se acuerdan que estaba sola, no?

DEJÉ LA VENTANILLA ABIERTA

Porque tengo una manera particular de vivir en el mundo cuando estoy sola, lo disfruto. Punto.

Violet Hill

Was a long and dark December, from the rooftops I remember there was snow, white snow. Clearly I remember from the windows they were watching while we froze down below...

When the future's architectured by a carnival of idiots on show, you'd better lie low.

If you love me, won't you let me know?

Was a long and dark December when the banks became cathedrals, and the fox became God. Priests clutched onto bibles, hollowed out to fit their rifles. And the cross was held aloft.

Bury me in armor when I'm dead and hit the ground. My nerves are poles that unfroze...

If you love me, won't you let me know?


I don't want to be a soldier who the captain of some sinking ship would stow, far below...

So if you love me, why'd you let me go?

I took my love down to Violet Hill, there we sat in snow. All that time she was silent still...


So if you love me, won't you let me know?


If you love me, won't you let me know?

Where do we go now? Where do we go? Where do we go now?

........................................................

- Buscate un psicólogo urgente mi amor, lo necesitás

- Sí, ¿no?

- Antes que te mate otro ataquecito como el del otro día

- O antes de que empiece a ver fantasmas


- Esos veo que ya los conocés

- Y si los conoceré... Debería hacerme amiga, ¿no conciencia?

- Deberías dejar de prestarles atención, aprendé a callarte la boquita

- Bueno... lo que pasa es que... es que... vos no entendés

- Sí, yo entiendo, sos obsesiva y enferma de los celos

- Sí, eso ya lo sé, y actúo en consencuencia... Parece que me gustara

- Es que la adrenalina es linda, la dramatización y todo eso

- Debo parecer una desesperada

- Sos terca, terca, terca... Deja de enamorarte y permanecer enamorada como si fuera el único mortal sobre la tierra

- Ni que hubiera muchos otros...

- Hay millones

- Pero ninguno me registra

- Y él tampoco

- Okay, nadie me registra, gracias, sos una amiga vos

- Todavía ;)

- Mirá nena, no tengo ganas de ponerme en campaña

- ¿Por qué? ¿Ahora me vas a venir a decir que querés que el príncipe azul te venga a buscar en un carruaje blanco por sí solo?

- Sí... -.-

- Tendrías que desplegar toda tu histeria

- No puedo desplegarla, yo la concentro...

- Si serás... Bueno... yo odio la histeria también

- ¿Y quién no? Es insoportable

- Sí, pero es éxito asegurado

- Prefiero estar sola

- Sola y enganchadísima con uno que no te da bola

- No, la segunda parte no

- ¿Lo podés evitar?

- Sí, bueno, no sé, capaz que algún día sí, pero prefiero hacerlo sola. Estoy cansada del juego histérico, de los 40 mensajes por día, las llamadas por teléfono y las desveladas all night long.

- Eso es porque no conocés a alguien con quien valga la pena.

- Claro... ¿qué me proponés? ¿Que reparta histeria por ahí y ande cazando sapos? No... yo voy directamente al "príncipe"

- Ajá, sí, de cada "príncipe" te enamoraste vos...

- Bueno, en ese momento lo eran

- Los príncipes no existen

- Bueno, pero sí existen los vagallos que no me gustan

- En eso concuerdo

- Genial, entonces no me molestes

- Ok, vos verás que hacés con tu vida aburrida en vacaciones

- Sí, cosa mía, conciencia ¬¬

- Bueno, cosa tuya Eugeñita de mi corazón

- Chau

- Chau, suerte

Qué ganas de llorar al pedo y dar lástima por ahí nena.

Violet Hill

Was a long and dark December, from the rooftops I remember there was snow, white snow.
Clearly I remember from the windows they were watching while we froze down below.
When the future's architectured by a carnival of idiots on show you'd better lie low...

If you love me, won't you let me know?

Was a long and dark December when the banks became cathedrals and the fog became God. Priests clutched onto bibles, hollowed out to fit their rifles and the cross was held aloft.
Bury me in armor when I'm dead and hit the ground, a love back home unfolds.

If you love me, won't you let me know?

I don't want to be a soldier who the captain of some sinking ship would stow, far below...

So if you love me, why'd you let me go?

I took my love down to Violet Hill, there we sat in snow, all that time she was silent still...

So if you love me, won't you let me know?

If you love me, won't you let me know?

La maga

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mi como una luna en el agua.

Julio Cortázar, Rayuela, 1956

Errante IV

- Sir, how can I help you? Sir?
- Sí, eh... - Santino subió la cabeza y buscó entre toda la maraña de pensamientos que lo azotaban cual era la respuesta que debía darle a aquella joven recepcionista. Ella lo miraba con perplejidad y conteniendo su impaciencia, con el teléfono descolgado en una mano.
- Tengo... eh... Sorry, I made a reservation for a room here - se detuvo, su inglés aún dejaba mucho que desear, sus "erres" sonaban demasiado marcadas y dudaba que ella hubiera podido entender algo.
- Okay, could you give me your name, please?
- My name? Yes. Santino Porta -

Buscó en su computadora unos segundos sin prestarle demasiada atención a los nervios del hospedado y le contestó aún con la vista fija en la pantalla.

- Room 414, Mr. Porta - pronunció "Porta" así como Santino había pronunciado "room". Mal, y dejando completamente en evidencia su nacionalidad. Él no pudo evitar tener que contener la risa sin que ella lo viera - You should give your luggage to our employee, he's going to send them to your room - dicho esto, y tras una sonrisa fría dio por terminada la operación y no volvió a mirarlo.

Nervioso y con las manos sudando llevó su equipaje hacia donde estaba el empleado del hotel que lo miró un poco más amablemente que la recepcionista y le indicó que subiera al ascensor.

- Are you Italian? Sir? - preguntó con una sonrisa afable mientras llegaban al piso cuatro
- I'm from Argentina. - ¿cómo mierda se diría "argentino"?
- Veo, pues entonces puede comunicarse conmigo en vez de sacrificarse intentando que Lilian lo escuche. Un placer, soy Esteban Morales, portorriqueño.

El moreno le tendió la mano. Santino le sonrió aliviado, un hispano parlante. Tal vez su estadía en Londres no fuera tan dura.
Llegaron al piso de su habitación y Esteban Morales lo ayudó a descargar sus valijas en la puerta de su habitación y lo dejó solo. Santino abrió la puerta, se sentó por instinto en la punta de la cama y se desajustó la corbata. Lo esperaban días movidos.

So I'm breaking the habit tonight...

Esta canción me da cierta sensación a... noche, a su adrenalina en realidad. Y el video simplemente, me encanta.

PD: Hay días que me agarran muchas ganas de escuchar Linkin Park, y ninguna otra cosa, Linkin Park, Linkin Park y Linkin Park, nada más.

White flag

I know you think that I shouldn't still love you, or tell you that. But if I didn't say it, well, I'd still have felt it, where's the sense in that?

I promise I'm not trying to make your life harder

Or return to where we were

I will go down with this ship. And I won't put my hands up and surrender.

There will be no white flag above my door,

I'm in love and always will be

I know I left too much mess and destruction to come back again. And I caused nothing but trouble, I understand if you can't talk to me again...

And if you live by the rules of "it's over" then I'm sure that that makes sense

I will go down with this ship

And I won't put my hands up and surrender

There will be no white flag above my door

I'm in love and always will be

And when we meet, Which I'm sure we will, all that was there, Will be there still. I'll let it pass and hold my tongue, and you will think that I've moved on...

I will go down with this ship

And I won't put my hands up and surrender

There will be no white flag above my door

I'm in love and always will be

Calesita

- ¿Vamos a casarnos? - la miró entre enternecido y emocionado por su propia propuesta.
- Bueno, ¿cómo?
- Vos me das tu anillo...
- Mi... ¿mi anillo? - lo observó detenidamente con desconfianza, ¿su anillo?
- Sí, y yo... te tendría que dar uno, pero no lo tengo acá...
- Dame tu pulsera - volvió a mirarlo pero esta vez sonriéndole maliciosamente
- ¡No! - al ver la decepción aflorando en sus ojos recomenzó - No puedo mi amor...-
- Esta bien, te doy mi anillo, podemos compartirlo - suspiró ella resignada
- Entonces este fin de semana es mío, y después tuyo otra vez - contestó él, la velocidad de sus palabras fue aumentando a medida que crecía su sonrisa, y ella, embobada y estupefacta como estaba, no percibió cómo en ese juego infantil solo se compartiría lo suyo.
Le dio el anillo, él se lo probó en todos los dedos y finalmente terminó en su meñique, luego tomó su mano, sujetó su cintura y se recostaron sobre ese banco de plaza a mirar el cielo hasta que se rompiera el hechizo.

Esto va a sonar raro, ya lo sé, pero...

EXTRAÑO A AURELIA :-'(

Reflexiones, ¿reflexiones?

¿Alguna vez escucharon de los temores egoístas? Porque eso es lo que siento hoy, un miedo completamente ruín, que no tiene sentido y me hace sentir mal. Sin embargo es un miedo muy profundo, me corroe, me desespera, me hace salir a buscar respuestas, o aún peor, morirme de desesperación por no poder hacerlo... Me gustaría poder correr y al avanzar borrar todo el pasado, borrar ese miedo, borrar, incluso sus recuerdos. Cómo quisiera que todo estuviera ante mis ojos, como quisiera estar convencida como antaño. Hay días que miro este temor desde lejos y pienso: "¡Qué estúpido! ¡Es imposible!" y me siento bien, segura. Y otras veces, como hoy, mi cabeza no para de dar vueltas sobre la misma teoría: "Si fue con vos, puede ser con cualquiera... en cualquier momento", y entonces me siento mal, ¿cómo si no?
Tal vez debería poder aceptar de una vez que es lógico, pero no quiero, no, todavía no... por favor... por favor no, que no puedo...
Si al menos fuera igual también de mi lado, o fuera solo de mi lado (por eso también soy egoísta) no habría más problemas.
Pero no, así no, así no me gusta, así no quiero.

Let's run away!

I wanna run away
Never say goodbye
I wanna know the truth
Instead of wondering why
I wanna know the answers
No more lies
I wanna shut the door
And open up my mind

 

Mírame,

Quien sabe a donde llegaré

Tómame,

No hay suelo ya donde caer

Tómame,

Que el mundo se vino los pies

Llévame

Que hoy ya no me quiero esconder

Ven

llévame del dolor

que esta oscuro y no oigo tu voz

sólo quiero respirar

sólo que la noche me va a matar

Dame un beso

algo que me haga al fin regresar

y llorar en tus brazos al fin

que aun hay tiempo para escapar

We´re leaving here tonight

There´s no need to tell anyone

They´d only hold us down

So by the morning light
We´ll be half way to anywhere

I´ve dreamt so long I cannot dream anymore

Let´s run away, I´ll take you there

Forget this life

Come with me

Don´t look back you´re safe now

Unlock your heart

Drop your guard

No one´s left to stop you now

- A veces pienso...
- ¿Qué?
- Que un día podés desaparecer de repente, que puedo darme cuenta que nada de esto era real.
- ¿Tenés miedo que me evapore?
- Sí, como si nunca hubieras existido...

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- ¿Sabés de qué tengo miedo?
- ...
- Tengo miedo que un día me digas "todo se terminó" y te vayas sin aclarar más.
- Si un día esto se termina, cuando te canses de mí, por lo menos te va a quedar el consuelo de que hubo algo.
- ¿Qué? No entendí.
- Jaja, yo tampoco.
- Jaja, no sé, tengo miedo, tengo miedo.

Lo abracé y me acerqué a su cuello, dejando que la frase se perdiera. Me tomó de la cintura y me acarició el pelo con la otra mano, resignado. Él sabía que no faltaba mucho para que sucediera.

Finales (caso abierto)

1. Prólogo

Me sentía mal y sabía porqué. Hace mucho tiempo que sé porqué. A veces tan solo intento no pensarlo, o mirarlo de otra manera, una más sencilla de encasillar. Pero no basta, no llena. En algunas ocasiones es mejor dejar que lo más profundo fluya, por más que resulte doloroso. No es inútil.
No soy de las que piensen que el dolor es inútil. En principio porque pertenece a nuestro montón de sentimientos, y luego porque no es para siempre. Hay que aprender de él mientras esté. Negarlo es mucho más dañino. Sufrir por causas perdidas, sufrir en vano, no es tal cosa. Como cualquier dolor se irá, y su productividad solo depende de lo que aprendamos de él.
Hay temas en los que uno es reiterativo sólo porque no llega al punto central de la cuestión y necesita transitar la periferia, verla y volverla a ver. No quiero hacerlo más. He llegado a odiar los círculos.

2. Buena suerte y hasta luego

Perdón por no haberme dado cuenta antes de lo que te rodeaba y por haber tenido así pretensiones que te eran imposibles cumplir.
Perdón por haber sido tan egoísta de haberte querido cerca de mí solo por mi bien, que aún anhelo.
Perdón por aún tener esperanzas vacías de que algún día todo estará como me gustaría.
Siento mucho el entender y no poder hacer, el deber callar y la impotencia de que mi amor se desgasta y no hay retorno.
No puedo ayudarte, no querés que lo haga, de todas maneras no podría hacerlo. Me siento inútil, a oscuras, trabajando en vano en las sombras. Mi buena intención no sirve.
Y perdón si sentís que todo esto es una molestia o un peso más.
Gracias de todas maneras por dejarme entrar al juego, por haber fingido bienestar mientras yo tejía mi nube de ilusión.
Gracias por haber entrado en mi vida y haberme dado una poderosa razón para querer.
Te quiero.

3. Disculpen las molestias, gracias por todo.

Ya no voy a sopesar las frases vacías insultando sin ton ni son. Ya no quiero ser puesta en el lugar de la víctima y que él sea el victimario. Ese análisis simplista: blanco-negro, bueno-malo, amor-odio no definen esta situación. Créanme, es distinta.
Si lloro lo hago por razones que van mucho más allá de una relación fallida.
Si lo hago es por mí, porque se cayeron mis ilusiones, se quebraron mis planes, porque sólo tengo ahora una mochila más en mi espalda.
Por él, que no puede amar, que necesita recibir y no quiere aceptarlo, porque nada más puede hacerlo solo y porque por mucho que yo ame eso no va a cambiar.
Por nosotros. Y por ellos, los que éramos hace sólo tres meses, los que se miraban y reían, los que podían ver en los ojos del otro el renacer de sí mismos. Los que jugaban, los que soñaban, ellos, ese nosotros de papel.
Nosotros somos esto, dos almas solistas. Dos personas que ahora pasan por indolentes, que juegan, que prueban estar cerca sin estarlo. Dos completos dementes, nosotros.
Si lloro, repito, no es por la pena egoísta de no poder besarlo.

'Cause I rather
waste my life

pretendig

than have to forget you for one whole minute ♫

Errante III

Se había quedado dormida. A su lado todavía estaba su taza vacía y el bolso de viaje todavía sin desempacar. Abrió los ojos con lentitud y se paró tambaleándose. Ese estilo de vida le estaba jugando una mala pasada.

Miró el reloj viejo de pared que se encontraba tras de sí. Las cinco menos cuarto. Qué buen horario para hacer nada. Hubiera seguido durmiendo, pero recordó que estaba pensando algo antes que eso sucediera. "Ah, sí. Lo que dejé atrás" repuso sin preocuparse demasiado.
Paulatinamente y sin proponérselo demasiado a conciencia, abrió el bolso y empezó a sacar las cosas una por una. Se dirigía intervalos a la habitación y acomodaba la ropa en pequeños grupos arriba de la cama. ¿Cuánto tiempo iría a quedarse allí? ¿Valdría la pena acomodar demasiado? ¿Buscar un trabajo?

Supuso que lo haría, como de costumbre. Casi sin pensarlo siempre buscaba trabajos donde supiera que prescindirían de ella pronto, y así, tendría una excusa para irse, no soportaba las cosas que duraban para siempre.

Abrió la laptop con cuidado cuando terminó de sacar las cosas y abrió el chat, que estaba colmado de grupos reducidos de personas que había conocido en sus esporádicos trabajos, que no había tratado por más de un año.
Mientras se levantaba a lavar su taza sintió el sonido de que alguien le había hablado. Se fijó. Era Marc, antiguo compañero de trabajo en Francia, en una oficina de cómputos. Era inglés, pero tan itinerante como ella.

Marc dice:
- Mademoiselle! How are you?

Victoria dice:
- Hey sir! Such a long time... Fine, 'n you?

Marc dice:
- It could be worse... haha, I'm studying :-O

Victoria dice:
- You? Unbelievable! lol.
- Are you still in France?

Marc dice:
- R U joking? I've never stayed in a country for more than a year. I'm in England.

Victoria dice:
- Me too.

¿Un conocido en Inglaterra? ¿Justo el día que ella acababa de llegar? Bueno, tal vez no fuera todo tan malo.

Victoria dice:
- Which part of Eng are you livin in?

Marc dice:
- London darling. Where are you?

Victoria dice:
- Fuck. I'm in Bristol.

Y ahora hay que seguir.

Y no sabés si perdiste o ganaste, o si es mejor darte por vencida de una vez.

Pero tenés que seguir igual, no te queda otra, amiga.

Vos dale para adelante, que nadie a tu alrededor sabe lo que hace mucho más que vos.

Yooooooooooooooo, yo, yo soy una pelotuda. Sí señores. Una pelotuda, que como toda pelotuda hace pelotudeces. ¿Pero quién me puede decir qué hacer pelotudeces no es divertido? Obvio, arriesgarse, es divertido, emocionante digamos. Pero tiene sus consecuencias.

Qué problema cuando no podemos imaginárnoslas.

Porque yo hago, total, "no me importa", o eso intento que los demás crean. "A mi ya no me interesa", no, claro, seguro Eugenia, te creemos. Y entonces hago experimentos, "a ver que pasa si digo tal cosa", "a ver que me contesta a tal otra", total estoy jugando.

Mierda que estoy jugando, no estoy jugando nada. Eso es lo que me gustaría.

Y a veces se me va de las manos.

Entonces ahí la empiezo a pasar mal. "¡No sabés lo que me dijo! ¡Qué hijo de puta! Y sí ¡hay que matarlo!"
Y sí, un poco habría que pegarle igual, porque él es un pelotudo que hace pelotudeces para ver que pasa, porque él juega tanto como yo.
Pero, la pregunta del millón sería:

¿Para qué jugar si después no te bancás perder?

Your star

So far away...

it's growing colder without your love

why can't you feel me calling your name?

can't break the silence,

it's breaking me !

Take my life, don't let it bleeding outside

Cuando caiga por fin la noche no lo dudes, llévame, envuelveme en mil telas, véndame lo ojos, te daré confianza ciega. Si tus alas te traen hoy hacia mí, ya sabes, tienes que bajar muy lento a mi encuentro, te estaré esperando como en cada ocaso tibio y fatal desde que sin resistirme en tí me vencí, desde que tu hechizo de luna llena me hizo prisionera.
Entonces si esta noche quieres, ven, transportame hacia mil mundos de fantasía, construye una escalera de ilusiones, miénteme sobre el despertar de un mundo perfecto, sueña con ser tú quien me rescate del averno. Sé que en tus brazos me hago fuerte y en tu mirada revivo, así como en cada uno de nuestros latidos, aguardo sin quererlo mi último suspiro.

PD: Es horrible, si se me ocurre alguna reforma la voy a hacer al instante, es realmente horrendo.

En camino

La tarde esta cayendo en tus ojos. Un auto en el vacío y la niebla, otra vez
Un rumor debajo de la piel. Casi sin querer, estamos en camino entre los espejismos.
Deslizándonos, hay sombra alrededor, vemos pasar montañas de piedra otra vez.

Por favor no leas el cartel, ni anuncios de ayer. No puedo esperarte hasta fin de siglo.

Quiero sentir tu cuerpo acercándose, quiero encontrar un paraíso y no volver.

Un rumor debajo de la piel. Casi sin querer, estamos en camino entre los espejismos.
No me asustan los desvíos, los puentes... Solo quiero seguir acercándome, acercándome... Puedo encontrar ese paraíso acercándome, acercándome.
Por favor no leas el cartel. Y casi sin querer, estamos en camino hasta fin de siglo.

Remembering...

X

La tarde estaba cayendo lentamente en la playa y la visión comenzaba a dificultarse. Las olas se quejaban a su paso y una leve brisa que anunciaba la llegada de la noche susurraba por entre las palmeras. Iba a hacer un día que no habían vuelto a ver a su amiga y que su teléfono permanecía apagado.
Después de la mañana perezosa, habían decidido volver al lugar de la fiesta, en un último intento desesperado, a buscarla allí.


El salón todavía conservaba restos de la noche anterior, todavía podía respirarse el clima enfermizo y frenético de jóvenes bailando, pero a simple vista, estaba vacío y el silencio sabía a desolación


- ¿Dónde estás? – susurró audiblemente el más alto y atractivo de los varones del grupo, un joven castaño, no podía evitar la sensación de desasosiego, y no soportaría la idea de no volver a verla.
- Deberíamos llamar a su madre – la joven que lo pronunció sintió en su espalda una ráfaga que la paralizó. Sus amigos la miraron duramente.
- Hagamos un último intento antes – le respondió un joven de baja estatura y ojos claros.


Comenzaron a caminar en lo que parecía la porción privada de playa de la casa quinta, a cada paso revivían esa noche, con cada pisada en la arena descubrían sus propios pasos, casi borrados, que describían círculos confusos en derredor. La única mujer del grupo se sintió avergonzada, casi humillada ante una imaginaria mirada de reproche, al descubrir sus pisadas junto a varias botellas rotas.


Se detuvo. ¿Qué había hecho ella esa noche? ¿Saberlo los ayudaría a encontrarla? Caviló en busca de respuestas pero por su mente sólo pasaron imágenes difusas, risas estridentes, caricias de desconocidos, ella misma bebiendo de una botella, ella con alguien de quién no podía recordar su rostro. ¿Qué había sucedido?


- ¿Te pasa algo? – su novio, el varón de ojos claros la miró sorprendido
- No…
- Vamos a encontrarla, no pudo haberse ido muy lejos
- Ella no quería venir – su garganta se fue cerrando a medida que caía en la cuenta de esto y derramaba un par de lágrimas – la trajimos a rastras –
- Pensamos que sería mejor para ella olvidar a… de una vez por todas, olvidarlo – acotó el tercero, su mirada se hallaba perdida y en su interior estaba más revolucionado aún que su amiga, el miedo lo embargaba y temía jamás poder decirle a ella, a ella que había desaparecido de la nada, cuanto la amaba.


Y mientras vagaba en sus pensamientos, en el recuerdo ínfimo que copaba su mente de la última mirada, perdida y aún enamorada de la mujer que había amado en secreto por años, su amiga tuvo un rapto de furia. No podía soportarse en su cuerpo, no podía soportarse en su culpa, en el infinito remordimiento de no recordar lo que hacía durante las noches de descontrol, cuando sus pupilas se dilataban con el compás de la música y se rompía su pacto tácito de fidelidad, cuando el alcohol embriagaba su mente y la llevaba por caminos más atrevidos.


Gritó, gritó con furia, gritó con impotencia. Tomó una de las botellas que se hallaban tiradas y ajadas en el piso y la hizo añicos contra una piedra. Miró a su novio y a su amigo con lágrimas en los ojos y sin poder contener su mundo comenzó a llorar mientras se derrumbaba en la arena.


- ¿Qué tal mal estaba ella…?- el novio de la joven la miró con pena mientras hablaba con su amigo – Quiero decir… ¿qué tanto había bebido ella y…? – no se atrevió a pronunciar el nombre de su amiga.
- La última vez que las vi, estaban por aquí, sentadas, tu novia, bueno…- se detuvo, con un rictus impaciente, y prosiguió – tu novia estaba siendo seducida por un extraño, mientras que a su lado sentada, un tanto bebida y con la mirada perdida estaba… -
- Sí, entiendo – contestó secamente y decidido avanzó, tomó a su novia del brazo y la calmó en su llanto. Ella lo miró desquiciada pero no pudo resistirse, le faltaban fuerzas.
- Por favor, necesitamos saber… ¿cuándo fue la última vez que la viste?