11.8.10

Eclipses

Miró hacia los dos lados y sólo se vio a sí misma entre los espejos.
No era luz lo que irradiaba,
sólo un poco de lástima, miedos y alcohol.

Era un horrible ella el de aquel espejo.
A cada caída de párpados se deformaba,
a costa de la no-vida, el no-final y el rencor.

¿Adónde estaba? No había espejos a su alrededor...

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