No puedo creer todavía lo que pasó. No caigo.
Y lo peor, todavía no siento nada. Sé que todo está ahí, reprimido por mi cabeza que dice: "No te ilusiones, no te precipites, no hagas cagadas", pero no lo puedo soltar.
Tengo algunas imágenes pero no me animo a reconstruir en mi cabeza todas las escenas. Solamente hay un cuadro perdido en mi cabeza de tus labios rosas acercándose a mi boca por segunda vez y yo sabía que eso tenía que ser así, que siempre tendría que haber sido así. Tu boca con mi boca, juntas. En ese momento no sentí que fuera una circunstancia especial, sólo que era lo lógico, lo que debía pasar.
Como si estuviéramos condenados a estar juntos a pesar de todo.
Aunque hayan pasado casi dos años desde la última vez.
Ya dije que las metáforas son peligrosas. El amor empieza por una metáfora. Dicho de otro modo: el amor empieza en el momento en que una mujer inscribe su primera palabra en nuestra memoria poética. Milán Kundera
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Entradas populares
-
It went by like dusk to dawn, isn't that the way? Everybody's got their dues in life to pay.
-
Ich fühle dich. Ich vermisse dich. Ich denke an dich die ganze Zeit. Ich kann ohne dich nicht leben. Ich liebe dich. Ist das klar?
-
Me estás matando, Marcos Mundstock.
-
El otro día soñé que estaba rodeada de mar y tenía un vestido blanco (sí, tengo una especie de cliché con eso), pero no era de noche, y el m...
-
Te juro que todo mi cerebro está concentrado en que tengo que sentirme bien. ¿Vos sabés cómo es eso?
-
¡Ya van a ver! ¡Las voy a buscar, seleccionar con cuidado y ya van a ver! Hay, POR LO MENOS, cincuenta minas más lindas que Jennifer Anisto...
-
Nada se pierde todo se transforma
No hay comentarios:
Publicar un comentario